Más focos en el amazonas

En 2024, los incendios en la Amazonía alcanzaron niveles alarmantes, con más de 53,000 focos registrados hasta finales de agosto. Esta cifra representa un aumento del 80% en comparación con el mismo período de 2023, y es el mayor número de incendios en la región desde 2010. La mayoría de estos incendios se concentran en los estados de Pará, Amazonas y Mato Grosso, lo que coincide con áreas de alta deforestación y uso intensivo de tierras agrícolas.

El fenómeno de El Niño, combinado con el cambio climático y la deforestación, ha intensificado la sequía extrema que afecta la región, creando condiciones propicias para que los incendios se salgan de control. Además, los incendios no solo destruyen la biodiversidad, sino que también afectan la salud humana debido a las partículas de humo que se dispersan en la atmósfera, incluso alcanzando ciudades como São Paulo, donde la calidad del aire se ha deteriorado gravemente.

El gobierno brasileño ha tomado medidas para enfrentar la crisis, asignando fondos para combatir los incendios y declarando emergencias en decenas de municipios. Sin embargo, la magnitud del problema sigue siendo preocupante, ya que estos incendios contribuyen directamente al calentamiento global y la pérdida de la capacidad de la Amazonía para regular el clima global.

Esta situación pone en evidencia la urgencia de reforzar las políticas de conservación y lucha contra la deforestación para mitigar los efectos devastadores sobre el medio ambiente y la salud humana

​(WWF-Brasil)​(Web oficial de WWF España )​(El País).